El pasado 5 de febrero Dino Segura Co-Fundador de la Escuela Pedagógica Experimental EPE, estuvo compartiendo en el Colegio Distrital Cundinamarca con los maestros, que conforman el Consejo Académico, una síntesis de los pilares de la Pedagogía EPE y la conveniencia, a propósito del tema, de introducir el trabajo por proyectos como alternativa para lograr sentido, pertinencia y compromiso de la institución con el territorio, además de otros elementos orientados en contribuir para la transformación de la sociedad.
Un colegio bautizado con nombre indígena
El Colegio Cundinamarca tiene muchas cosas interesantes entre ellas es que su nombre se encuentra estrechamente relacionado con el territorio. La institución, ubicada en la localidad de Ciudad Bolívar, deriva su nombre de la palabra Kechua Kuntut Marqa que significa Nido del Cóndor y según narra la historia
Los conquistadores españoles al llegar a estas tierras y escuchar las dos palabras, lo interpretaron como Cundirumarca, Cuntinamarca y finalmente Cundinamarca, que en castellano vendría a significar comarca o provincia del cóndor. Namarca es una deformación de la palabra comarca o marca, que antiguamente era utilizada para nombrar algunos territorios en Europa.
Club Luna Llena adaptado para el contexto del colegio
Por otra parte, el I.E.D. Cundinamarca tiene un club de astronomía llamado Luna Llena dirigido por el docente de astronomía Jaime Cabarcas. El espacio tiene como objetivo entrenar a niños en condición de discapacidad a través del programa Misión X de la Nasa y la Agencia Espacial Europea que promueve en los niños buenas condiciones físicas y una la buena nutrición a través del entrenamiento para astronautas.
Según el profesor Cabarcas una buena educación pública inclusiva todos tienen la oportunidad de participar y por esta razón se propuso adaptar las pruebas de entrenamiento para el contexto del colegio y de esta forma facilitar que todos los niños y las niñas en condición de discapacidad puedan participar:
Mirando las pruebas del entrenamiento para astronautas noté que estos ejercicios podían ayudarles a las niñas y niños en varios niveles, tanto físico como cognitivo. Y ha sido un éxito total. Uno se da cuenta de eso al ver sus caritas cuando vamos al observatorio a mirar las estrellas. Eso no tiene precio
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